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Conecta con tu mamífero interior y ten una mente feliz

Este tema nos resulta muy interesante: El ser honestos sobre nuestro mamífero interior y, en segundo lugar, comprender nuestro poder para redirigirlo individualmente en nuestra propia mente.


Tendemos a idealizar los lazos sociales de los animales y es fácil proyectar en ellos que son cálidos y agradables entre sí, pero la realidad que conocemos es que los animales tienen muchos conflictos en sus grupos. Los animales se mantienen en sus grupos a pesar del conflicto porque eso les protege de los depredadores.


A todos nos gusta nuestra independencia, pero cuando nos sentimos amenazados, buscamos la seguridad del apoyo social. Queremos ambas cosas: queremos esa independencia, pero queremos la seguridad del apoyo social y ambas cosas son naturales, así que la autoaceptación es una parte importante de hacer las paces con el mamífero que llevamos dentro.


La biología puede ayudarnos a entender estos impulsos y a encontrar un camino mejor. Vamos a hablar de por qué nuestro cerebro busca urgentemente la buena sensación de pertenencia, por qué es difícil conseguirla y cuáles serían algunas formas nuevas de conseguirla.



¿Por qué nuestro cerebro busca la buena sensación de pertenencia?


Sabemos que un mamífero aislado es rápidamente asesinado por los depredadores, por lo que la selección natural construye un cerebro que le recompensa con la buena sensación de oxitocina cuando encuentra apoyo social. La oxitocina nos motiva a encontrar apoyo social al hacernos sentir bien. Cuando uno se aleja de la manada, la oxitocina cae y se siente amenazado.


La oxitocina crea la sensación de que es seguro bajar la guardia, así que esto es lo que realmente sientes cuando tienes apoyo social: Puedo bajar la guardia porque, si hay peligro, el resto de la manada me alertará y eso es lo que permite a un animal de manada relajarse lo suficiente para comer en lugar de estar constantemente en alerta máxima por si hay depredadores.


¿Por qué es difícil de conseguir?


Nuestro cerebro no está diseñado para liberar oxitocina todo el tiempo. Esta es la parte frustrante. La verdad es que: la oxitocina de todo el mundo está baja hasta que se hace algo para estimularla y entonces, en poco tiempo, se metaboliza, luego desaparece y entonces hay que hacer algo para estimularla de nuevo. Así es como nuestro cerebro está diseñado para funcionar.


Si tuvieras oxitocina todo el tiempo, bajarías la guardia cuando no deberías. El cerebro de los mamíferos evolucionó para tomar decisiones cuidadosas sobre cuándo liberar las neuronas de la oxitocina, conectar cuando fluye la oxitocina y eso te conecta para encenderla más fácilmente en circunstancias similares, de modo que cada cerebro está ansioso por repetir los comportamientos que desencadenaron la buena sensación en el pasado.


De todas las sustancias químicas de la felicidad, sólo se obtiene un poco en la situación adecuada que se supone que motiva la acción, un paso hacia la supervivencia. Así pues, la confianza es lo que el cerebro de los mamíferos busca realmente.


Definimos la confianza con las vías de la oxitocina construidas a partir de la experiencia pasada, que es realmente compleja. Cuando se traiciona la confianza, el cortisol se dispara porque la amenaza es tan cercana que te hace pensar en no confiar en situaciones similares. Cada cerebro espera el conflicto o el rechazo donde lo encontró antes.


Ahora bien, el conflicto o el rechazo, (y todos tenemos ambos), de tu juventud es lo que construyó las mayores vías en tu cerebro.


Estrategias para conseguir un cerebro feliz


He aquí tres formas breves y sencillas de estimular la oxitocina:


Construir habilidades de confianza uno a uno: Si construyes confianza con individuos, eres menos dependiente de la manada para tu oxitocina. La confianza en tus propias habilidades de construcción de confianza te permite dar pasos independientes sin sentir que tu supervivencia está amenazada.


Pequeños pasos repetidos: Los pequeños actos de confianza estimulan la oxitocina. Sigue dando pequeños pasos hacia los demás y la repetición construirá una vía neuronal que espera la confianza. La expectativa es realmente un camino hacia el encendido de tu oxitocina.


Expectativas realistas: Esta es la complicación de la vida. Tenemos grandes expectativas sobre el apoyo social. Definimos el apoyo social de alguna manera grandiosa porque cuando somos jóvenes necesitamos mucho apoyo y cuando somos jóvenes es cuando nuestro cerebro está conectado, así que conectamos la expectativa de que el mundo debería apoyarme y eso no es realista, pero nadie está ahí fuera diciéndote eso, así que te lo estamos diciendo.


En la infancia, la supervivencia depende de ser comprendido. Nuestros circuitos tempranos, la base de tu cerebro, es que otras personas deben satisfacer tus necesidades o si no vas a llorar. Todos conectamos fuertes sentimientos sobre ser comprendidos que permanecen con nosotros de por vida; por supuesto tu cerebro verbal no piensa eso, tu cerebro verbal piensa "si estoy molesto, debe ser un hecho real que algo está mal en el mundo", porque la electricidad en el cerebro fluye como el agua en una tormenta. Encuentra los caminos de menor resistencia.


Sabemos que a menudo se critica a la gente y se le dice "no andes en automático", pero en realidad nuestro cerebro está diseñado para funcionar en automático. Por eso nuestro objetivo es hacer que los nuevos comportamientos sean automáticos. ¿Cómo hacerlo? Con la repetición, de lo contrario repetimos todos los patrones sin intención consciente. Por eso sentimos que debemos seguir a la vieja manada, porque no obtendremos oxitocina sin ella.


La conclusión es:


Se puede tener confianza grupal, confianza social y vínculos individuales sin dejar de aceptar que la otra persona es un mamífero que está presionando para satisfacer sus propias necesidades de supervivencia y tú eres un mamífero que está presionando para satisfacer tus necesidades de supervivencia.


La oxitocina permite a los mamíferos formar vínculos, pero el cerebro sopesa constantemente los beneficios de supervivencia de esos vínculos.


Los mamíferos cooperan cuando la recompensa es mutua y, si puedes aceptar eso, entonces puedes ser más hábil para construir esos puentes que te permitirán sentirte seguro y sentirte seguro automáticamente porque habrás sustituido esos vínculos de cortisol de baja confianza por vínculos de oxitocina de mayor confianza.


Nuestro cerebro evolucionó para promover la supervivencia, no para hacerte sentir bien todo el tiempo, así que cuando lo entiendas podrás dar los pasos necesarios para sentirte bien.


Nuestro cerebro guarda las sustancias químicas de la felicidad para el comportamiento que promueve la supervivencia: tú buscas la pertenencia porque satisface tus necesidades de supervivencia y los demás buscan la pertenencia porque satisface sus necesidades de supervivencia.


Todos tenemos altibajos formados por viejas vías, pero entender el cerebro de los mamíferos nos ayuda a gestionarlo mejor.

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